Historias de pandemia: su impacto en la sociedad y el trabajo – Entorno VUCA

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En los tiempos que corren mucho se habla de cuál será el rescate del aprendizaje que nos dejará esta Pandemia del Coronavirus.

No será posible tener todas las respuestas, por el simple hecho de estar transitándola aún. Lejos de que seamos pesimistas sino realistas, falta mucho tiempo todavía para dar la batalla por finalizada y sacar conclusiones.

No obstante, si logramos interpretar el pasado, esto podría ayudarnos a entender el presente y construir el futuro. El mundo ha tenido las experiencias de la Epidemia de Fiebre Amarilla de 1870/71 y de la Pandemia de Gripe Española de 1918.

En este artículo, podrán leer las causas, lo que dejaron de aprendizaje esas enfermedades y lo cambios del mundo laboral y los oficios.

El enfoque está dado bajo el entorno VUCA (o VICA en español) que es el acrónimo de volatilidad, incertidumbre, complejidad y ambigüedad. Sin duda que las enfermedades mencionadas, como la Poliomielitis de 1956, o la Gripe A de 2009 o la actual COVID 19 se caracterizan por desafiarnos en la volatilidad (cambios frecuentes, rápidos y significativos), la incertidumbre (acontecimientos y resultados impredecibles), la complejidad (multiplicidad de factores) y por último la ambigüedad (falta de claridad y dificultad de entender la situación)

EPIDEMIA FIEBRE AMARILLA – Año: 1870/71

Causa: Mosquito Aedes Aegypti. Aparece la ambigüedad dado que no se entendió la situación causante hasta finalizada la epidemia.

Potenciadores de la enfermedad: insuficiente agua potable, napas contaminadas, hacinamiento, zanjones, saladeros contaminantes del Riachuelo entre otros.

Aquí se evidencia la incertidumbre, dado que, frente a los resultados desastrosos de muertes, no se relacionó nunca con estos focos antes mencionados. También la complejidad, porque se multiplicaron los factores de hacinamiento con aguas estancadas.

Todo el contexto llevó a una volatilidad con cambios rápidos en el número de infectados y muertes diarias, afectando al personal de salud. La epidemia fue interpretada como un momento clave para los profesionales de la medicina científica de la época

¿Cómo impactó y que cambios trajo este evento para poder rescatar y aprender?

La limpieza de las aguas estancadas, el blanqueo con cal de las paredes, el embaldosado de los patios, la creación de una red de agua potable, la separación del desagüe de aguas pluviales con las cloacas, la centralización de la recolección de residuos, las obras de saneamiento, el adoquinado de calles, la creación de veredas y del servicio de crematorio formaban parte de disposiciones que pudieron ser consideradas como un dique de contención contra la epidemia y, al mismo tiempo, como patrones políticos que buscaban ordenar ciertas maneras de habitar en la ciudad.

Adicionalmente, se creó la divisoria y medianera entre propiedades, además de fijar distancias para la excavación de pozos de agua y colocación de inodoros, sumideros, caños y chimeneas. Por último, se sancionó una ordenanza especial sobre la construcción de letrinas, que estableció las características que debían tener (profundidad del cavado, diámetro, materiales, etc.)

Como dato impactante en la provincia de Buenos Aires, la cobertura hospitalaria se multiplicó en los últimos años del siglo XIX, de catorce hospitales que la provincia contaba en los años ochenta, en 1895 sumaban 37 es decir había aumentado en cifras absolutas a 23 establecimientos en 14 años, y de 37 se llegó en 1913 a 93, hubo un crecimiento absoluto de 56 establecimientos en un período de 19 años.

A nivel laboral se desarrollaron y potenciaron empleos y oficios como enfermeros, personal de crematorios, construcción, obra civil pública e infraestructura.

PANDEMIA GRIPE ESPAÑOLA – Año: 1918

Causa: Brote del virus Influenza A del subtipo H1N1. Se evidenció una gran incertidumbre, porque a diferencia de otras epidemias de gripe que afectaban principalmente a niños y ancianos, sus víctimas fueron también jóvenes y adultos saludables; y animales, entre ellos perros y gatos. También tuvo alta volatilidad porque el virus sufrió una mutación o grupo de mutaciones que lo transformó en un agente infeccioso letal.

Potenciadores de la enfermedad: Viajes intercontinentales (principalmente de tropas USA – Europa) sin conocimiento de ser portadores del virus. Un escenario altamente complejo por el efecto multiplicador.

El contexto fue de un escenario ambiguo por no tener clara la transmisión y volátil por la virulencia de la enfermedad.

¿Cómo impactó y que cambios trajo este evento para poder rescatar y aprender?

Como prevención se hicieron desinfecciones con fenol, cresol (creolina), soluciones de hipoclorito de sodio o de bicloruro de mercurio en lugares públicos, oficinas y tranvías. También se usaba naftalina y sulfato de cobre. Se prohibió escupir en el suelo. Se recomendaba desinfección de boca y garganta con soluciones de agua oxigenada, o con una mezcla de aceite y mentol, que también se usaba en inhalaciones. Pero el antiséptico más popular contra la gripe era el alcanfor, que llegó a escasear seriamente generando sobreprecios desmesurados para la época.

Para el tratamiento se experimentó con antisepsia de garganta, pequeñas cantidades de valerianato de quinina, salicilato, codeína para la tos y aceite alcanforado. También se aplicaban vacunas anti-neumococos, que eran producidas con células enteras de bacterias muertas de S. pneumoniae, en el Instituto Bacteriológico (hoy Instituto Carlos G. Malbrán). También se producía suero anti-neumococo. Estas vacunas y sueros fueron muy empleados en todo el mundo, como únicos elementos para la profilaxis y el tratamiento, hasta el advenimiento de las sulfamidas y la penicilina.

La medicina y la ciencia eran campos mucho más limitados para tratar la enfermedad, si las comparamos con la actualidad.

Un dato curioso es que se adoptaron medidas como suspensión de clases y cierre de todo tipo de locales donde pudiera haber aglomeración de gente como cines, salones de bailes, teatros. Los bares podían estar abiertos hasta las 11 de la noche, pero los talleres no paraban si no estaba enfermo más del 30 % del plantel. ¿Nos suena familiar algunas cosas?

Para finalizar, aquellos municipios que habían prohibido reuniones masivas y habían cerrado teatros, escuelas e iglesias tuvieron un menor número de muertes.

A nivel laboral la falta de trabajadores causada por la gripe y la guerra les dio a las mujeres el acceso al mercado laboral. Además, las nuevas trabajadoras se beneficiaron de los aumentos salariales que resultaron de la escasez de mano de obra. En definitiva, se abrieron nuevas oportunidades a sectores potencialmente laborales que no eran tenidos en cuenta.

El daño causado por la pandemia estimuló el avance de la salud pública, que fue impulsada como el desarrollo de la medicina social, dando lugar al desarrollo de científicos y especialidades medicinales.

COVID 19 – Los protagonistas somos nosotros

Recorriendo la historia y sin detenernos en la Poliomielitis de 1956, ni en el HIV de 1983 y en la gripe A de 2009, llegamos al escenario que hoy todos vivimos.

Sin duda estamos experimentando nuestro propio escenario VUCA y solo el tiempo post pandemia nos dirá que aprendizajes hemos tenido y que hábitos del mundo laboral y social cambiarán.

Hoy, es muy prematuro saber como sociedad que aprendizajes rescataremos para un futuro, que sin duda será distinto al que imaginamos con anterioridad.

¿Podes imaginarte como será ese futuro?

SEL CONSULTORES – Soporte y Estrategia Laboral